Patologías

Hernia discal

Generalmente, la hernia discal se produce por la presión sostenida durante años sobre el disco intervertebral. De forma más rara, la hernia discal se establece de manera traumática. El disco se sitúa entre dos vértebras, habitualmente es a nivel de lumbares o cervicales donde los discos pueden herniarse. Procesos degenerativos ( artrosis), una mala postura, impactos repetitivos, rigidez muscular generalizada, facilitan que este espacio intervertebral se estreche, y al aumentar la presión sobre la zona el disco se vea obligado a migrar, a herniarse.

En ocasiones una hernia discal puede comprimir a su vez una raíz nerviosa cervical o lumbar, dando a su vez dolor, parestesias y hasta impotencia funcional. Éste es el cuadro que se produce en la ciática, o compresión del nervio ciático por hernia discal.

Los síntomas son uno o una combinación de los siguientes:

  • dolor asociado a la distribución del nervio.
  • Debilidad / hormigueo de la musculatura internada.
  • Dolor en la zona de la espalda donde se sitúa la hernia.
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